Vivienda MV

La vivienda se presenta como un volumen escultórico, un bloque integral de líneas rotundas y formas contundentes, definido por su solidez material y su relación con la luz natural. El revestimiento de travertino, seleccionado por su textura y durabilidad, envuelve el edificio como una segunda piel, proporcionando contraste entre la robustez del conjunto y la precisión de sus detalles. Las perforaciones estratégicamente distribuidas no solo facilitan la entrada de luz, sino que también establecen un juego de sombras y transparencias, dotando a la edificación de un ritmo visual coherente con su diseño contemporáneo.

La organización volumétrica se desarrolla en tres niveles claramente diferenciados, cada uno concebido con una función específica y en constante interacción con el exterior.

En el sótano, el diseño prioriza la funcionalidad: incluye un área de trabajo, estacionamiento y almacenamiento, además de dos salas técnicas destinadas a sistemas esenciales como aerotermia y depuración. Este nivel se integra discretamente en la parcela, reduciendo su impacto visual.

La planta baja constituye el núcleo de la vivienda, donde se desarrollan las actividades diurnas. Un espacio diáfano y conectado integra el salón y el comedor, organizados en torno a una escalera de doble altura que se convierte en el elemento central. Esta escalera no solo conecta los niveles, sino que aporta verticalidad y carácter al diseño interior. La cocina, amplia y equipada con un comedor informal, se comunica directamente con estas áreas principales. Un distribuidor cercano a la escalera da acceso a un aseo y a un despacho, completando la funcionalidad de esta planta.

La planta primera está diseñada para el descanso, priorizando la privacidad y el confort de los usuarios. Incluye un dormitorio principal con vestidor, un dormitorio junior con su propio vestidor y una sala de juegos, además de un dormitorio de invitados. Un baño compartido sirve a esta planta, adaptándose a las necesidades familiares.